21 de noviembre de 2012






Al que vive del ayer jamás le llega un mañana,se envuelve solo y se afana por conservar la distancia; 
la grasa se pone rancia a fuerza de estar colgada. 
También está el que de apuro del presente se ha olvidado. Vive siempre fatigado por alcanzar el mañana; 
hoy se queda con las ganas y mañana con pasado. 
De las dos formas de vida ninguna es buena a mi ver. Que el que guarda va a tener cosas,es ya muy sabido. 
Pero en las horas perdidas jamás se encuentra un después. 
La vida, la vida es sólo presente. El futuro es esperanza. Es bueno tener constancia y mirar con claridad. 
Si el hoy es conformidad mañana es perseverancia.