10 de noviembre de 2012

Si es necesario no te querré.

Ya no sé cual es la realidad, realmente ya me siento perdida en un gran bosque en el que todos lo caminos me llevan al mismo sitio, en el que todos los arboles son iguales. Yo no quiero querer a alguien que para él sean todas igual, a alguien que nunca quiera, a alguien que pase todo, pero la realidad es que si, que te quiero. Palabras, segundos, minutos leyendo, escuchando y entrelazando. Mira yo no soy tan fuerte para aguantar todo esto. Yo siempre soñé con un amor de los de las películas, de los que todo era perfecto, pero me he dado cuenta de que no existen. Dime que me olvide de ti, dímelo, gritamelo, escribemelo, dime que me odias, que preferirías a cualquiera antes que yo, intenta si hace falta hazme daño si esto supone el odiarte. Siento que por momentos la vela que encendí se está apagando. Se están rompiendo todos los pedazos de besos de películas que tenía en la cabeza, se están escapando las palabras de amor que se dedicaron en libros con los que soñaba. Que me están cayendo más piedras de las que mi cuerpo débil puede soportar. Y pasas de tocar un día con las manos el cielo a pensar que has caído tan fuerte por la acción de la gravedad que ves como algo imposible levantarte junto a ti.